Editorial: Toray
Año: 1951
Ejemplares: 5
Dibujos: J. Sánchez
Guión: J. Sánchez
Tamaño: 17 x 24 cm.
Páginas: 10 + Cubiertas
Precio: 1,25 pts.
Ejemplares: 5
Dibujos: J. Sánchez
Guión: J. Sánchez
Tamaño: 17 x 24 cm.
Páginas: 10 + Cubiertas
Precio: 1,25 pts.
Las aventuras en el
mar, los piratas, los galeones, los abordajes, las luchas a babor y estribor
fueron ingredientes habituales en el tebeo clásico español. Y por ese tiempo
Toray era toda una experta en esas coordenadas marinas repletas de personajes
grotescos y parcheados. Por los quioscos habían pasado ídolos de la viñeta como
El Capitán Coraje (1946), El Diablo de los Mares, El Hijo del Diablo de los Mares por
obra y gracia de memorables autores: Iranzo, Ferrando y Boixcar,
respectivamente.
Precisamente sería un
hermano de Boixcar el autor de esta colección que fue rubricada como Hombres del Mar, título algo más
genérico de lo habitual, sin que éste señalara a personaje alguno. No así la
trama, que recogía las desdichas y heroísmos de un joven alférez llamado Carlos
de Santisteban y al que el amor por una mujer le lleva a convertirse en
involuntario pirata. De ahí el título del primer cuaderno, El Caballero Pirata, que tenía su qué.
José María Sánchez
Boix, el autor gráfico y al parecer también literario, acababa de llegar a
Toray ayudado por el buen nombre de su hermano. Boixcar se encontraba en plena
ascensión al olimpo de los dioses con cabeceras como La Vuelta al Mundo de dos Muchachos o Hazañas Bélicas 1ª serie. Precisamente en esta serie bélica José
María Sánchez Boix sellaría su primera colaboración con la editorial, al
dibujar en solitario el cuaderno núm. 26 de la colección.
A pesar de la gran
influencia de Boixcar, --influjo afeado por su escasa destreza para el dibujo
en ese tiempo-- J. Sánchez –nombre con el que firmó los cuadernos de esta
colección— no debió dejar mucha huella en los lectores, como demuestra el escaso
recorrido de la colección: tan sólo cinco cuadernos. En adelante, la labor que
llevó a cabo como entintador de su encumbrado hermano le permitió mejorar su
visión narradora y su plasticidad gráfica, hasta el punto de abordar en
solitario una cantidad de obra considerable en series como Hazañas Bélicas 2ª Serie y Mundo
Futuro, entre otras.
Portada del cuaderno núm. 1
Interior del cuaderno núm. 1